Accede a tu cesta con otros dispositivos (Teléfono, tableta, ordenador). Guarda tu correo electrónico, luego búscalo en la sección de la cesta haciendo clic en "Recuperar mi cesta".
Por favor, introduzca una dirección de E-MAIL con el formato adecuado.
Imagen preservada al 90 %Mover imagen Dimensiones ideales para usar un marco estándar.
Añadido a su wishlist
Añadir a su wishlist en curso
Imprimir arte añadido a su wishlist
Compartir esta obra
Comparte con sus opciones de impresión
Enlace para ser compartido
Añadir a mi wishlist
Productos adicionales
Lienzo sobre bastidor
desde de 62 €
Impresión de arte
desde de 18 €
Montaje en aluminio
desde de 31 €
Obra enmarcada 22.8 x 26.2 cm
90 €
Más obras de Paul Gauguin
La visión Tras el Sermón
22 x 22 cm
desde de 20 €
¿Cuándo te casas?
24 x 18 cm
desde de 18 €
¿De dónde venimos? ¿Quiéne...
23 x 50 cm
desde de 26 €
Pechos con Flores Rojas
24 x 18 cm
desde de 18 €
Bodegón con tres cachorros
24 x 18 cm
desde de 18 €
El Espíritu de los Muertos Ve...
22 x 22 cm
desde de 20 €
Paisaje Tahitiano
18 x 24 cm
desde de 18 €
Descripción
"El Cristo Amarillo" es una obra impactante del artista francés Paul Gauguin, pintada en 1889 mientras residía en Tahití. Esta pintura al óleo sobre lienzo mide 91 cm por 68 cm y actualmente se encuentra en exhibición en el Museo de Orsay en París.
La obra presenta una visión audaz y simbólica de Cristo. Gauguin representó a Cristo con una piel de un amarillo brillante y cabello negro, creando un contraste llamativo con las representaciones tradicionales de Cristo. Ver más
Cristo está rodeado de la naturaleza tahitiana, con flores y hojas tropicales que parecen formar un halo alrededor de su cabeza.
La elección de colores vibrantes y el uso de motivos tahitianos en el fondo reflejan la influencia de la cultura polinesia en Gauguin. La obra es una declaración audaz de la búsqueda de espiritualidad del artista en un contexto exótico.
"El Cristo Amarillo" encarna la búsqueda personal de Gauguin de un significado espiritual y la exploración de temas religiosos. La representación no convencional de Cristo desafía las convenciones religiosas de la época.
Esta icónica obra es un ejemplo del enfoque innovador de Gauguin hacia el arte y su deseo de trascender las fronteras artísticas y culturales.